viernes, 15 de noviembre de 2013

The walking dead y nosotros.

Desde hace siglos existe bronca en torno al tema de si lo que somos -es decir, lo que hacemos y pensamos- se debe a lo que aprendemos o a la herencia genética. Antes utilizaban otros términos pero la bronca era la misma. La cuestión es que hoy en día el debate está superado, ambos factores interaccionan y tienen pesos específicos más allá de la interacción entre ambos. Sin embargo encuentro todavía personas que parecen suponer que las personas pueden trascender de su propia naturaleza, como si la cultura pudiera moldearnos "hasta la médula".

Un amigo afirmó sobre la serie "The walking dead" y sobre todo acerca del cómic en que se basa: "No me gusta esa imagen que nos venden en The walking dead -en la serie y sobre todo en el cómic- sobre la parte que sacaría de nosotros una catástrofe apocalíptica, como si de repente todos nos volviéramos unos asesinos, no me lo trago". La afirmación no es literal pero iba en esa línea. Me parece chocante que mi colega afirme esto ya que día a día me encuentro muestras de los humanos.

Ayer me levanté y puse las noticias. Hablaban sobre el desastre que ha ocurrido recientemente en filipinas. Aparecía una sucesión de alcaldes que afirmaban cosas tales como "No sé si voy a poder controlar a la población si no llega comida". Se daban sucesivos pillajes, robos y asesinatos -entre otras cosas han escapado de las cárceles multitud de presos, esto anima el cotarro-. En un entorno en el que no hay restricciones legales y policiales las posibilidades de acción de una persona aumentan de forma bastante significativa. Imaginad en una situación ficticia como la que nos narra la serie "The walking dead". Claro que sí, tendríamos mucha más libertad para hacer ciertas cosas que a día de hoy no podemos hacer.

En el día a día observo conductas muy típicas de los primates de sabana africana que somos. Ayer un violinista en el metro Alonso Martínez estaba tocando mientras una pandilla de poligoneros le increpaba burlándose de él. Imaginad que esa pandilla estuviera en un entorno donde no existen las leyes y se encuentran con un tipo con cosas que se pueden vender o cambiar por otras que a ellos les gustan... ¿Está claro no? Una tropa de homo sapiens en su entorno natural habría agredido, tal vez matado y después saqueado al miembro solitario. O tal vez no, pero mi predicción es que lo más probable habría sido la agresión.

En el mismo sitio, el mismo violinista -que no comprendo cómo soporta a la panda de cabrones que pasan por allí a diario- fue echado a gorrazos por una imbécil que había puesto allí un chiringuito de Orange. Es decir, había corrido a gorrazos al tipo porque tenía un territorio y ella quería ese territorio. Imaginad que esto hubiera ocurrido en un entorno natural, una hembra de  homo sapiens se encuentra a un macho y ¿lo corre a gorrazos? No me cuadra, la situación es rara porque que un macho y una hembra sean solitarios es muy extraño en nuestra especie, pero pongamos que ocurre. Tal vez el macho le hubiera pegado una paliza, o la hubiera violado, o le habría ofrecido el territorio so pena de ponerse en posición de lodorsis y al lío... 

En resumen, no olvidemos de dónde venimos y que en 2000 años no hemos cambiado apenas. Seguimos siendo una pandilla de primates hechos para vivir bajo una presión trófica brutal, una presión predatoria brutal y formando grupos estables para  obtener recursos y protección. Esos mismos primates somos nosotros, solo que viviendo en un entorno artificial que hemos creado a nuestro alrededor. Si ese entorno artificial se viniera abajo, la historia que cuenta "The walking dead" nos parecería una cosa muy idílica, sería un cuento de hadas en comparación con nuestra vida diaria.